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Cómo evitar el uso incorrecto de los gerundios en la escritura

Los gerundios son una forma verbal que se utiliza en la lengua española para expresar acciones en proceso o que están sucediendo. Sin embargo, su uso puede generar confusiones y errores gramaticales si no se emplean correctamente en la escritura. A continuación, se ofrecen algunas recomendaciones para evitar el uso incorrecto de los gerundios en la escritura.

1. No utilizar el gerundio para expresar acciones concluidas

Uno de los errores más comunes en el uso de los gerundios es utilizarlos para expresar acciones que ya han concluido. Por ejemplo, en lugar de escribir "Ella salió corriendo hacia la puerta y cerró con fuerza", se escribe "Ella salió corriendo hacia la puerta y cerrando con fuerza". En este caso, se debería utilizar el pretérito perfecto simple o el pretérito perfecto compuesto para indicar que la acción ya ha finalizado.

2. Evitar el uso del gerundio como sustituto del infinitivo

Otro error común en el uso del gerundio es utilizar esta forma verbal como sustituto del infinitivo. Por ejemplo, se escribe "Le pidió que dejara de fumar", en lugar de "Le pidió que dejase de fumar". En este caso, se debería utilizar el pretérito imperfecto de subjuntivo para indicar una acción que se prolonga en el tiempo.

3. No abusar del gerundio en la redacción

Aunque el gerundio es una forma verbal útil para describir acciones en proceso, se recomienda no abusar de esta forma en la redacción de textos. El uso excesivo de gerundios puede hacer que la lectura resulte monótona y poco natural, lo que afecta negativamente a la calidad del texto.

4. Utilizar el gerundio para describir acciones simultáneas

Aunque se deben evitar los usos incorrectos del gerundio que ya se han mencionado, también hay situaciones en las que es adecuado utilizar esta forma verbal. Por ejemplo, se puede utilizar el gerundio para describir acciones simultáneas que ocurren al mismo tiempo. Por ejemplo, "Mientras caminaba por el parque, iba escuchando música en su reproductor".

5. Prestar atención a las concordancias verbales

Es importante prestar atención a las concordancias verbales cuando se utiliza el gerundio. En algunos casos, deberá concordar con el sujeto de la oración y en otros casos, con el objeto. Por ejemplo, en la frase "Los niños estaban jugando en el parque", el gerundio "jugando" concuerda con el sujeto "los niños", mientras que en la frase "Los padres observaban a sus hijos jugar", el gerundio "jugar" concuerda con el objeto "hijos".

6. Revisar el uso de los gerundios en el contexto

En algunos casos, el uso del gerundio puede depender del contexto en el que se emplea. Por ejemplo, "Estaba lavando los platos cuando se rompió una taza" es una oración correcta que utiliza el gerundio "lavando" para describir una acción en proceso, mientras que "Estaba hablando por teléfono cuando se rompió una taza" no es correcta, ya que el gerundio "hablando" no se ajusta al contexto de la oración.

7. Utilizar otras formas verbales para variar el estilo

Para evitar la monotonía en la escritura, se recomienda utilizar otras formas verbales en lugar del gerundio. Estas formas pueden incluir el infinitivo, el participio, el subjuntivo o el indicativo, dependiendo del contexto y del propósito del texto.

  • Infinitivo: "Aprender a tocar la guitarra requiere práctica y dedicación"
  • Participio: "El libro leído por la tarde resultó muy interesante"
  • Subjuntivo: "Espero que vengas a la fiesta este fin de semana"
  • Indicativo: "Siempre me gustó viajar en tren"

En conclusión, el uso correcto de los gerundios en la escritura requiere atención a las concordancias verbales, evitar su uso como sustituto del infinitivo, no abusar de ellos en la redacción y utilizarlos para describir acciones simultáneas. Además, es importante revisar el uso de los gerundios en el contexto y variar el estilo utilizando otras formas verbales. Al seguir estas recomendaciones, es posible mejorar la calidad de la escritura y evitar confusiones y errores gramaticales.